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  • En la preparación integral de nuestros atletas, su formación física y mental cuenta con el apoyo de Carles Tur como coordinador del área médica, Meritxell Bellatriu como psicóloga y Pilar Clapers, Claudia Juan y Lucía Ruiz-Cotorro como fisioterapeutas

Como coordinador del área médica de la Real Federación Española de Vela, Carles Tur, licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, fisioterapeuta y dietista y nutricionista, define de manera sencilla la preparación integral de un atleta: “Para mí hay tres pilares muy sencillos sobre los que preguntar a un olímpico: Cómo haces la preparación física, como te nutres y como descansas. Son los tres pilares básicos para que el deportista esté física y mentalmente al cien por cien para poder competir, y siempre hay algo en lo que mejorar”.

Para Carles Tur, esta preparación física es “una preparación holística, un gran piano con muchas teclas en el que un buen preparador físico debe saber qué tecla tocar de cada persona en cada momento”.

Para lograr los objetivos físicos se utilizan gadgets como el anillo Oura que da “información muy importante sobre cantidad y calidad de sueño, la variabilidad, que procesamos para ver cómo está el equilibrio del sistema simpático y parasimpático y adaptar ciertas cargas de entrenamiento”.

Además del gimnasio, una actividad habitual de nuestros deportistas es la bicicleta, un ejercicio que para Tur es “muy positivo y sin impacto. Los ejercicios de baja intensidad modulan unas áreas cerebrales y las de alta intensidad inciden sobre otras, así que tener esa posibilidad de dualidad en un deporte como la bicicleta tiene una incidencia en la función cognitiva muy grande”.

Otro tema importante durante los Juegos de Paris, como lo fue en Tokio, es el calor, para lo que nuestros atletas también se están preparando y contarán con equipamiento específico para mitigar ese calor.

A nivel mental, Tur destaca cómo al llegar a unos Juegos, “la presión se multiplica por 1.000, no se puede comparar con ninguna otra competición”. El trabajo a realizar durante el ciclo olímpico para afrontar esta situación recae en Meritxell Bellatriu, psicóloga del equipo olímpico español, una pieza que Carles Tur define como “imprescindible. Armoniza la convivencia entre los deportistas y entrenador”.

Meritxell Bellatriu se inició en la psicología clínica para avanzar posteriormente a la deportiva, un campo que ha trabajado tanto a nivel privado como en la Masía del Barça. Integrada en el mundo de la vela con el equipo español, para ella este “es un deporte muy complejo en el que la mente juega un papel muy importante a nivel técnico y de cálculo. El deportista debe saber controlar su foco atencional, un aspecto muy complejo cuando hay tantos estímulos y la toma de decisiones es tan rápida”.
 
Con los deportistas atendidos, en la mayoría de los casos, por psicólogos deportivos, Bellatriu coordina con ellos las líneas de trabajo a establecer y la creación de sinergias en los momentos en los que estos profesionales no están presentes con los deportistas. También se refuerza el trabajo entre el técnico que acompaña al deportista y el psicólogo deportivo, así como la comunicación de cada entrenador con los regatistas.
 
De cara a los Juegos, destaca que “lo más importante es adaptarnos a las necesidades de cada regatista para que llegue en las mejores condiciones. Se trabajan sesiones de liderazgo, comunicación, gestión de conflictos y, sin fórmulas mágicas, que cada técnico enfatice y conozca las necesidades de cada regatista para que podamos hablar de rendimiento y optimización de la salud, del crecimiento de la persona”.

En el equipo de fisioterapeutas, Pilar Clapers es licenciada en INEF y fisioterapeuta. Después de muchos años trabajando en el sector de la natación sincronizada ha pasado, como ella misma cuenta, “de un deporte en el que las variables están bastante controladas, a uno mucho más abierto e impredecible”.
 
Pilar cubre un aspecto del equipo enfocado en la terapia manual, y nos habla de las tecnologías que dan soporte al trabajo del equipo de fisioterapeutas de la RFEV: “Disponemos de máquinas de diatermia que nos ha facilitado en Enovis, ecógrafos, máquinas de electroestimulación, de compresión y crioterapia y piscinas de hielo entre otras, así como equipos para casos de lesión”.
 
Respecto al trabajo previo a los Juegos Olímpicos, Clapers destaca que el equipo se está centrando “en solventar algunos puntos débiles para que los deportistas lleguen fuertes a la competición. Además, trabajamos para evitar lesiones por sobrecarga e incidir en que ellos mismos tengan unos hábitos de autocuidado”.

Claudia Juan llega al equipo nacional tras trabajar con la Federación Catalana de Vela, el equipo nacional finlandés de la clase Europa, el equipo australiano de surf, un largo viaje por Asia para descubrir distintas técnicas de yoga y meditación, y una especialización en fisioterapia invasiva, aprendizajes que aplica con nuestros deportistas.
 
Claudia destaca que en la rutina de nuestros atletas las mañanas están destinadas a la activación, “repartir la sangre a todos los músculos del cuerpo para entrar en contacto con todos los rangos de movimientos en cada articulación para que, una vez vayan al agua, el cuerpo esté preparado para el esfuerzo. Al volver se trabaja de forma más lenta con posturas mantenidas, centrándonos en la respiración y en devolver al músculo la elongación que necesita para estar preparado para el día siguiente”.

Lucía Ruiz-Cotorro es la tercera pieza del equipo de fisioterapeutas de la RFEV. Tras colaborar con el equipo finlandés de Nacra 17, compaginando su trabajo con deportistas de hockey y tenis, llega al equipo nacional de vela especializándose sobre todo en movilidad, gimnasio, terapia invasiva y mucha prevención.
 
Sobre la prevención, incide en que es “muy importante tener la capacidad de detectar una lesión antes de que venga, ahorra mucho tiempo tanto al deportista como a los fisios y, sobre todo, es la clave de una pronta recuperación. Tanto en en camilla como en gimnasio, saber si el deportista está haciendo algún movimiento o ejercicio que le provoque dolor para establecer un protocolo de prevenciones que mejoren en su rendimiento deportivo”.
 
En la prevención destaca los estiramientos tras una sesión de entrenamientos en el agua y “un regenerativo de unos 10 minutos para bajar la carga con bici, de cardio, para disminuir el ritmo y que no haya tanta acumulación de ácido láctico en el cuerpo”.